26 marzo 2011

Que te pego, leche

Todos los que lo conocieron en los años previos a la expropiación hablaban de él como un hombre serio, reservado, muy trabajador y profundamente religioso. El perfil de José María Ruiz-Mateos no hacía sospechar en absoluto el espectáculo mediático que ofreció en su lucha por mantener vivo el llamado 'caso Rumasa'. Años más tarde el empresario confesaría el gran esfuerzo humano y psicológico que le supuso protagonizar esa cruzada en la que un día se disfrazaba de Superman.

Su lucha por conseguir que la expropiación de la empresa Rumasa no se mandara al cajón del olvido, estuvo jalonada de numerosos y extravagantes actos de protesta y de varias entradas y salidas de la cárcel. Especialmente sonada fue su agresión en 1989 al que fuera ministro de Economía, el socialista Miguel Boyer. Al grito de «que te pego, leche», Ruiz-Mateos le golpeó con el puño en la cabeza y le partió las gafas.


En este mismo año, el empresario creó su propio partido político, Agrupación Ruiz-Mateos, y se presentó con gran éxito a las elecciones al Parlamento Europeo consiguiendo dos escaños y más de 600.000 votos.

Su empeño por mantener vivo en la memoria colectiva el recuerdo de la expropiación, le llevó a protagonizar momentos ciertamente esperpénticos. En estos 25 años Ruiz-Mateos ha sido declarado en busca y captura en varias ocasiones. Cuando algo así sucedía hacía visitas relámpago a fiestas locales, ferias y acontecimientos populares, donde burlaba a la policía y desaparecía.

Traje de Superman

El más conocido de todos sus atuendos fue el disfraz de Superman, aunque Ruiz-Mateos tampoco tuvo inconveniente en vestirse de presidiario, de anciano, de chulapo madrileño o de nazareno penitente. El actual propietario de Nueva Rumasa se encargó de que todos los españoles conocieran su caso y, además de sus apariciones constantes en los medios, pagó avionetas que paseaban grandes pancartas por los aires en las más importantes playas del litoral español.

A medida que pasaban los años y la Justicia iba determinando responsabilidades, las apariciones de Ruiz-Mateos fueron disminuyendo. Los últimos coletazos de su campaña mediática fueron en forma de 'spot' televisivo. Realizó un anuncio de una de sus marcas con una actriz de rasgos muy similares a los de Isabel Preysler y como eslogan de sus bombones Trapa eligió una frase que evocaba aquel día de mayo de 1989, «que te atrapo, leche».


Fuente

1 comentario:

  1. hola che! me hice pipi con el blog, asi que los felicito y agregue el mismo a mis enlaces en http://diariodeunsuperfriki.blogspot.com/. en mí blog tambien hablo re enserio!!! larga vida y prosperidad!!!

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